miércoles, 4 de mayo de 2011

La revista

 Sin poder escapar a la maldita manía, esa que tiene el hombre de clasificar y etiquetar todo lo que lo rodea, me propuse definir lo que significa para mí la Rolling Stone el día que volví a comprar otro número. Hacía tiempo ya que no compraba una revista y eso que cuando era adolescente y el rock brotaba por mis poros me consideraba un coleccionista de la misma. Las fotos, las notas de las bandas y los cantantes que iban haciendo huella en mi vida aparecían en sus páginas y eso era motivo para adquirirla. Cuando venían mis amigos a casa,  o hacia una fiesta llegaba un momento de la noche en el que las hacia desfilar por la ronda para que entre mano y mano se lucieran.  El tiempo imparable en nuestra coherencia fue pasando y  pasó y la vida, que  hizo que los pocos pesos que tengo en mi juventud y en mi bolsillo se fueran destinando en otros asuntos. Hasta que una tapa seductora toco en lo más profundo de mí ser, en ella aparecía una leyenda del rock -No importa cual porque no tienen por objeto estas líneas polemizar sobre cuáles son las leyendas del rock-. Esa tapa fue la que condujo a que volviera a comprar una revista. Primero leí el artículo sobre la banda de mis amores, pero después recorrí con mis ojos todos los recuadros que  aparecían, las líneas al pie de la foto, me deslice por las letras de los comentarios y las críticas de las bandas, los toques, los libros y las películas. Desde la editorial hasta la última página. La exprimí como una naranja hasta dejarla sin jugo y fue justo en ese momento que me di cuenta que en estos tiempos informáticos de redes sociales, ciber-espacios y demás, la Rolling Stone se diferencia de cualquier sitio o estado de información porque conserva la tinta impresa en el papel, transformándose así en una gran enciclopedia del contexto actual de las distintas expresiones culturales no solo de ambos márgenes del río sino que nos inunda con informaciones del mundo actual. De todas formas no están ajeno a la tecnología sugiero leerla con internet al lado.

                                                                                                                

1 comentario:

  1. Nunca tuve interes por las revistas de nada,me hes dificil comprender tu punto de vista a pesar de haberlo sentido muy cerca por algunos amigos.
    Esta muy bien escrito y siempre es bueno revivir algo que nos hizo feliz.
    @emilicaty

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